Miss Ile, eres sinónimo de éxito; gracias por tanto

Quienes conocemos a Miss Ileana sabemos que su fuerza nace del enorme corazón que guarda en el pecho. Durante más de dos décadas en el ITYC, nos ha enseñado el valor de la palabra, del respeto y la responsabilidad.

Desde sus inicios como titular de un grupo en Jardín de Niños, se auguraba el éxito que cosecharía durante estos años.

Poco a poco se ganó el cariño de la familia ITYC y así avanzó hasta convertirse en una de las directoras más queridas por la comunidad.

Hoy la despedimos con una inmensa gratitud, pues nos confirmó que la docencia brota de la vocación, del amor a la enseñanza y del respeto a las infancias felices.

En su historial viven docenas de generaciones que en la actualidad son adultos funcionales que contribuyen al bienestar social y ese logro nos llena de orgullo, pues su paso por el colegio sólo deja grandes recuerdos y momentos inolvidables.

Para quienes trabajaron codo a codo con ella, sólo hay palabras de gratitud. Tal es el caso de Miss Isabel Guillén, quien asegura que su ejemplo es digno de replicarse en todos los sentidos de la vida: personal y profesional.

“Miss Ile, sabes del cariño que te tengo y de la falta que nos harás cuando ya no estés aquí, pero sé que esta decisión de jubilarte es la correcta, pues se ajusta perfecto a tu plan de vida. Te voy a extrañar mucho”, enfatizó.

Mientras tanto, Miss Mónica Flores, afirma que Miss Ile siempre fue un ejemplo para ella. “Durante el tiempo que convivimos llenaste mi vida profesional y personal con tu ejemplo, me enseñaste a dar y recibir. Te quiero mucho y sé que te irá muy bien en esta nueva etapa que comienzas”, afirmó.

Sin duda, la huella que deja Miss Ile es inmensa, pues con ese carácter afable, cordial y esa sonrisa que siempre la caracteriza, inundó nuestros días de enseñanzas útiles para la vida, para los días malos y los días buenos.

Pronto comenzará un nuevo ciclo en su vida, lejos del ITYC, pero muy cerca de nuestros corazones. Ella afirma estar segura de la decisión que tomó junto a su esposo y sus dos hijos, con quienes ya planeó diferentes actividades para que la transición de la vida laboral a su jubilación sea amable y generosa.

Pero, ¿qué representó su estadía en el ITYC?

Además de lo ya mencionado, Miss Ileana representa: amor, amistad, compañerismo, lealtad, seguridad, firmeza, compasión, empatía, cercanía, liderazgo, confort, sabiduría, inteligencia, astucia y muchos adjetivos más.

Su paso por el colegio deja un destello de luz que servirá como referente para las futuras generaciones, para aquellos hombres y mujeres que estén dispuestos a contribuir con la enseñanza para generar un mundo mejor.

Como directora del departamento de Jardín de Niños vio graduarse a docenas de generaciones que cotinuaron su camino en la Primaria ITYC.

Además, se preocupó y ocupó por el bienestar de las niñas y niños del preescolar, pues siempre promovió la capacitación de su personal docente para estar actualizado en los contenidos académicos y tecnológicos.

Ahora, su historia quedará grabada en el libro del ITYC y sólo podemos desearle lo mejor; Miss Ile te vamos a extrañar mucho, pero sabemos que estarás bien y tu legado perdurará por el resto de los días.

Gracias por tanto.